El Hércules perdió su segundo partido de la temporada en un encuentro aciago, donde pesó mucho la rigurosa expulsión de Pichu Atienza. Tropi, en la primera parte, y Ramírez, ya en el segundo acto, avanzaron al equipo de Curro Torres. El Hércules no se rindió. Fran redujo distancias en el 84 y los alicantinos tuvieron dos buenos remates de Adri Cuevas y de Casares para empatar el partido. El esfuerzo, con un jugador menos, no cristalizó, y el Hércules se mantiene en zona de promoción con diecinueve puntos.

Las múltiples bajas que arrastra el Hércules obligaron a Pacheta a hacer equilibrios en su once inicial. Dio continuidad a Pardo en el lateral derecho y situó de interior por la misma banda a Aitor. También avanzó a Adri Cuevas para poder jugar con un doble pivote formado por Miñano y Fran. El técnico burgalés se guardó en la recámara a Javi Casares, para utilizarlo de revulsivo o como recambio de Fernando.
 
Fue una primera parte aciaga, marcada por las decisiones del colegiado y el gol logrado por Tropi en el minuto once. Del gol, nada que objetar. Nació de una indecisión de la defensa herculana y del acierto del futbolista valencianista que picó la pelota en la salida de Chema. El Hércules tuvo el empate en un buen centro al cual estuvo a punto de llegar Granell y en un chut duro de Adri Cuevas desde la frontal. Cuando todavía el Hércules intentaba recuperarse del gol en contra, el colegiado andaluz, Moya Baena, expulsó por doble amonestación a Pichu Atienza, en una rigurosa decisión. Aún así, tuvo el empate el Hércules en la última jugada de la primera parte, gracias a una buena acción de Miñano remontando la línea de fondo para ceder el pase de la muerte a Fernando. El andaluz no acertó con el remate. 
 
Con un jugador menos, mermado por las múltiples bajas y con cero a uno en el marcador, inició la segunda parte el Hércules. El partido se rompió y el Hércules, con coraje y esfuerzo, intentó igualar el marcador. Pero otro error defensivo le condenó. Demasiada pasividad en una jugada personal de Ramírez acabó con el balón en la red de Chema. Pacheta dio entrada a Casares por Granell, todavía renqueante de su lesión, y a Juanma por Miñano. Y el grupo dio muestras de entereza para pelear el partido hasta el minuto 90. Llegó el gol de la esperanza con un disparo raso, duro, de Fran González muy lejos del área. Y pudo llegar el segundo con otro disparo de Adri Cuevas y, sobre todo, con la última jugada. La tuvo Javi Casares en el segundo palo, pero el balón no quiso entrar. A pesar de la derrota, el Hércules se mantiene tercero en la clasificación a solo dos puntos de Nàstic y de Lleida. Toca seguir trabajando, corregir los errores y pensar solo en el próximo partido ante el Deportivo Alcoyano.