El Hércules ha vuelto a los entrenamientos con la mente puesta en el partido ante el Lleida, pasando página del mal encuentro ante el Alcoyano. El equipo alicantino es cuarto, depende de sí mismo, y ante el equipo catalán tiene otra final en su lucha por asegurar la promoción de ascenso. El mediapunta del Hércules, Javi Casares, abogó por “no mirar atrás y ser optimista” para centrar todos los esfuerzos en el duelo del próximo domingo: “Hay que levantarse después de la derrota y pensar en el Lleida. Ahora todo lo que nos queda son finales y, viendo la igualdad del grupo, en el momento que te equivoques puedes salir de promoción”.

Casares reconoció que el pasado domingo “perdimos una oportunidad” de abrir brecha con rivales directos. “No dimos la imagen que sí ofrecimos en partidos anteriores”, aseguró el futbolista del Hércules e insistió en que la derrota “nos tiene que servir para dar un paso al frente”. “Fue un momento difícil porque no lo hicimos bien, pero no podemos hundirnos por un mal partido. Los puntos valen doble a partir de ahora y todo son finales. Personalmente solo miro al siguiente partido”, afirmó Casares. 
 
 
El jugador del Hércules cree que el problema del Hércules “no fue de actitud” y abogó por aprender del error, centrarse en el partido ante el Lleida y afrontarlo “con mentalidad positiva” para poder reducir distancias con un rival directo.