El jugador del Hércules, Adrià Granell, se mostró motivado ante la posibilidad de reaparecer contra el Cádiz después de su rotura en el tendón del recto anterior del cuádriceps en la pierna derecha. Tras tres meses alejado de los terrenos de juego, el valenciano ha vuelto a entrenar con el equipo y afirma encontrarse “mejor de lo que esperaba” pese a que “no estoy físicamente como soy yo, son muchos meses como para estar a mi nivel pero estoy a disposición del míster”.
El extremo, radiante de alegría, afirmó que “esto es como un premio personal, pensaba que ya no iba a jugar más” pero que es algo que se ha ganado con esfuerzo, pues “he estado haciendo doble sesiones de entrenamiento cada día”. El jugador también comentó que durante este tramo ha tenido recaídas, pero que “me he cuidado al máximo para recuperarme cuanto antes”.
Adrià Granell explicó que no se sentía cómodo al no poder realizar su trabajo y “tenía que hacer algo porque este grupo humano es muy bueno, les hice vídeos de motivación, junto con las muestras de cariño que les dimos Indiano y yo”.
Finalmente, cree que la eliminatoria ante el Cádiz va a ser “muy difícil”, pues se van a enfrentar a “uno de los mejores equipos de la categoría, con jugadores individualmente espectaculares”. Aunque afirmó que pueden tener cierta ventaja en el plano moral, pues ellos vienen de caer ante el Oviedo y, al Hércules, la victoria ante el Murcia “nos ha dado un golpe anímico increíble”.